Legislació lingüística - cdlpv
Información, 02.10.2003
A. G.
Los responsables administrativos de las diez conselleries se reunieron ayer en Ares del Maestre de la mano del conseller de Educación y Cultura, Esteban González Pons, y del director general de Política Lingüística, David Serra. La elección del lugar, un pueblo a 1.194 metros de altitud donde en invierno no viven más de 60 personas, no fue casual: Ares del Maestre fue el municipio por el que Jaume I inició la conquista de las tierras valencianas en 1232.
Ese valor simbólico fue el que el conseller Pons intentó trasladar a la declaración aprobada ayer, un decálogo para impulsar el uso de la lengua autóctona en la Administración autonómica y conseguir que esta se convierta en «ejemplo y referencia» para la sociedad. La reunión, celebrada en el ayuntamiento bajo la vigilancia del alcalde popular, Francesc Fuentes -el médico de la vecina Vilafranca-, y la secretaria de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Marisol González, fue breve. Duró lo justo para oír el discurso del conseller y hacer un par de retoques al documento que llevaba bajo el brazo. Minutos después del mediodía, se abrían las puertas al público (periodistas y técnicos de Política Lingüística) y Pons leía el decálogo y se hacía la foto «histórica» junto a la estatua de Jaume I.
La declaración, que tiene sobre todo un valor simbólico de refuerzo y dignificación del valenciano, plasma negro sobre blanco algunas acciones que ya se realizaban en la Administración y contiene algunos compromisos llamativos. En especial, el hecho de que todos los altos cargos -de conseller hacia abajo, hasta jefes de sección y técnicos- tendrán que utilizar la lengua vernácula en sus intervenciones públicas «siempre que tengan un dominio suficiente del valenciano».
Para que las excepciones sean las mínimas, González Pons anunció la puesta en marcha de unos cursos para altos cargos. El decálogo establece asimismo que los funcionarios de la Generalitat que atienden directamente a los ciudadanos deberán iniciar la comunicación en valenciano y sólo cambiaran al castellano si los usuarios responden en castellano o piden expresamente su uso.
Serra dijo que, para conseguir este fin, se potenciará en 2004 la habitual orden de cursos de valenciano para funcionarios y la conselleria de Administración Pública desarrollará un plan para la aplicación de este punto del decálogo. No obstante, Esteban González Pons dejó claro que los criterios están en vigor «desde ya mismo».
El conseller insistió en que «no se trata de imponer», sino de alcanzar la normalidad lingüística. En su discurso, habló de «una nueva etapa» y se refirió a la declaración de Ares como «el primer paso» de un camino que ha de llevar a «la consolidación del uso social» del valenciano y a su «renacimiento». El documento recoge el espíritu del texto aprobado el pasado 23 de julio por la Acadèmia, el cual instaba a los políticos y a la Administración autonómica a dar ejemplo en el uso de la lengua autóctona.
La casualidad ha hecho, precisamente, que coincidiendo con la aprobación de éste decálogo, los grupos de la oposición en la Diputación -Socialista y Mixto- puedan volver a tratar hoy en la sesión plenaria de la corporación la citada propuesta para, en la línea de lo planteado por la Acadèmia Valenciana de la Llengua, tratar de normalizar la utilización de la lengua autóctona en la institución provincial. El asunto quedó sobre la mesa en el pleno anterior y también en las últimas comisiones.
1. Les comunicacions internes de les conselleries es redactaran en valencià.
2. Les comunicacions entre les diferents conselleries i les delegacions territorials d'estes es redactaran en valencià.
3. Les comunicacions de les conselleries amb les diputacions, els ens públics i els municipis de predomini lingüístic valencià, segons l'article 35 de la Llei 4/1983, d'Ús i Ensenyament del Valencià, es redactaran en valencià.
4. Les comunicacions de les conselleries amb els municipis de predomini lingüístic castellà, segons l'article 36 de la Llei 4/1983, d'Ús i Ensenyament del Valencià, es redactaran en valencià i en castellà.
5. Les comunicacions, cartes, notificacions, etc. que remeten les conselleries als ciutadans que resideixen en un municipi de predomini lingüístic valencià, segons l'article 35 de la Llei 4/1983, d'Ús i Ensenyament del Valencià, es redactaran en les dues llengües oficials, figurant en primer lloc el valencià, i en segon lloc el castellà.
6. Les comunicacions, cartes, notificacions, etc. que remeten les conselleries als ciutadans que resideixen en un municipi de predomini lingüístic castellà, segons l'article 36 de la Llei 4/1983, d'Ús i Ensenyament del Valencià, es redactaran en les dos llengües oficials, figurant en primer lloc el castellà, i en segon lloc el valencià.
7. En les intervencions públiques dels consellers, secretaris autonòmics, subsecretaris, directors generals, secretaris generals administratius, caps d'àrea, caps de servici, caps de secció i tècnics, el valencià serà la llengua d'ús sempre que estos tinguen un domini suficient del valencià.
8. Les unitats administratives que atenen directament els ciutadans iniciaran en valencià la comunicació. Si el ciutadà respon o sol·licita que la llengua de comunicació siga el castellà, continuaran la comunicació en castellà. En tot cas, extremant el respecte per la llengua elegida pel ciutadà.
9. La imatge pública i corporativa de la Generalitat Valenciana i de totes les seues unitats administratives serà en valencià: retolació de les fatxades, senyalització interna, segells, encunys i cartells.
10. Els fullets informatius, les pàgines webs, els anuncis i les revistes es faran principalment en valencià.